Un nuevo estudio dice que dejar a los bebés llorando no es tan terrible como piensa


Por Felipe Hernández

¿Dejarlos llorar hasta quedarse dormidos?

Cuando tienes un bebé en tu vida, entiendes realmente cuál es la importancia del sueño y lo difícil que es lidiar con el sueño de una criatura que no entiende lo que eso es. Probablemente también estés al tanto de una técnica para entrenar la habilidad de los bebés para quedarse dormidos solos, cuando lo necesiten y sin tener que estar luchando con ellos para que lo hagan: Dejarlos llorar.

Con muchas personas que apoyan este método y muchas más que se declaran abiertamente detractoras, esta práctica ha sido foco de mucha polémica. Especialmente con estudios que se han empañado por demostrar lo negativo que es para la salud y bienestar de los bebés. Pero eso aún está por comprobarse…

Dejar a los bebés llorando no solo es efectivo, sino que además no causa ningún tipo de stress o problemas emocionales en los bebés.

Al menos eso es lo que sostiene el estudio publicado por el diario Pediatrics, el cual fue realizado a través de un seguimiento de 43 bebés saludables, que tenían desde 6 a 16 meses de vida. Pero además, habían sido identificados según sus padres con problemas para conciliar el sueño.

La mecánica del estudio llevado a cabo en Australia, consistía en separar los 43 bebés en 3 grupos diferentes y elegidos al azar. Un grupo que retrasaba progresivamente con 15 minutos la hora de ir a dormir de sus bebés (para hacerlo más somnolientos cada vez), otro que efectivamente dejaba a sus bebés llorar hasta dormir (por un periodo de tiempo determinado y controlado) y por último un grupo de control (sin ninguna técnica, solo información general para dormir lo más normal posible).

Los bebés que fueron dejados llorando se durmieron casi 15 veces mas rápido y se despertaron menos veces, que el grupo de control y progresivo, respectivamente.

El estudio también se encargó de seguir los niveles de estrés de los bebés y de las madres, midiendo sus niveles de la hormona cortisol; estos demostraron que solo los bebés del grupo de control mostraron niveles más altos de estrés. Incluso 12 meses después de las pruebas, se encontraron con que los niveles de esta hormona no sufrían variaciones considerables entre los grupos.

Una razón más para creer que dejar a los bebés llorando no es tan horrible como estamos acostumbrados a pensar, de hecho, podría ser algo natural. Sin embargo, eso siempre será una decisión de los padres, ya que son ellos quienes deciden el mejor tipo de formación para sus hijos.

Y tú, ¿crees que hay que dejarlos llorar o simplemente este método no te convence?

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