Por Daniel Morales
Nuestra capacidad para comunicarnos es una obra de arte.
Desde la leyenda de la Torre de Babel en la que Dios castiga a los hombres que quieren alcanzarlo creando distintos idiomas, hasta la inquietante pregunta que surge en la película “Arrival”, ¿cómo lograremos comunicarnos con los aliens después del primer contacto? Ambos escenarios demuestran que la incapacidad de comunicarnos con alguien genera problemas difíciles de resolver. Incluso el lenguaje corporal puede ser bastante comprometedor, por lo que al viajar es importante conocer las costumbres del lugar, pues el choque con lo ajeno va más allá del lenguaje. La cultura es amplia y eso implica que algunas expresiones que tal vez no imaginamos, pueden ser ofensivas.
Al viajar a otros países, debes considerar que existen costumbres distintas, temas que aunque a ti no te molesten pueden incomodar a los demás. La sociedad es cambiante y cada lugar alberga una esencia, misma que los hace pensar distinto a ti. A pesar de eso, hay que entender que un mundo globalizado implica que las barreras se rompen con facilidad, las siguientes recomendaciones te ayudarán a viajar sin ofender a nadie.
No hables de dinero en Francia
En Unmappedmag, una francesa escribió un gran artículo en el que lista las razones por las que muchos extranjeros creen que los franceses odian que la gente hable de dinero cerca de ellos (por tacaños, por traumas de la guerra y más). En realidad lo que hace es desmentir eso y acepta que ella y sus amigos siempre hablan de dinero, por lo que si bien es recomendable seguir las reglas que te dan antes de llegar a Francia, puedes saber que algunas están para quebrarse.
No des flores en números pares en Ucrania
Supuestamente esto es efectivo en el país ex soviético y en todo Rusia. Regalar un número par de flores se considera descortés porque son para los funerales.
No toques el claxon en Nueva Zelanda
Tal como lo dice una mujer de la India, solamente debes tocar el claxon si pretendes insultar a la otra persona.
No toques al sexo opuesto en público
Esto sí es algo generalizado, aunque las nuevas generaciones están luchando contra eso. A la mayoría de los turistas se les advierte que para no pasar muy malos ratos en un país tan grande (y conservador) como India, evites tocar al sexo opuesto.
No des propina en Japón
Otro país con una gran tradición y una vista particular del honor. Hoy no es tan valorado, pero en Japón sí, por lo que dejar propina es de mala educación, pues su trabajo es remunerado y no creen necesitar incentivos extras para realizar su trabajo como se debe.
No preguntes a qué iglesia van en Noruega
Esto es un poco absurdo. Por el alto nivel de ateismo en Noruega, muchos creen que preguntar acerca de la institución eclesiástica es de mala educación, pero en realidad a nadie le molesta que preguntes algo tan sencillo de responder.
No hagas el signo de Ok en Turquía
Un país como Turquía tiene riquezas culturales que no encontrarás en ningún otro lugar, pero lamentablemente continúa siendo muy conservador, en especial respecto a la libertad sexual. La mano haciendo un círculo con dos dedos y el resto levantados significa que insinúas que alguien es homosexual y se considera una grave ofensa.
No llames a nadie por su primer nombre en Kenya
Otro mito internacional. Es verdad que si no conoces a alguien o no tienes una relación más allá de lo casual con alguien, no deberías referirte a ellos con el primer nombre sino con el nombre completo o un “señor” o “señorita”, en cuanto la relación se convierte en amistad es perfectamente aceptable hacerlo.
No llegues tarde en Alemania
La puntualidad es muy extraña en América Latina. Ningún país acostumbra ser puntual y eso es bastante problemático con los países europeos, sobre todo con Alemania. Con bastante precisión, los germanos suelen llegar a la hora indicada. No conocen el concepto “elegantemente tarde”.
Siempre deja propina en Estado Unidos
A diferencia de Japón, la cultura estadounidense invita a derrochar y dar propina por casi todo. Los restaurantes pueden ser muy hostiles si dejas una propina menor al 15% e incluso los taxis buscan que se les pague más de lo que marca el taximetro.
Siempre debes averiguar las costumbres de un país antes de visitarlo. Es importante que aprendas acerca del idioma, las costumbres y los hábitos de cada persona. Si te conviertes en un viajero y no en un turista, podrás recorrer todo el mundo sin ningún problema.
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